Publicista
de profesión
Amante de la vida
saludable de corazón
¿Qué
hago?
Después de un giro de vida en donde obtuve un ticket de cambio, decidí hacer lo que realmente quería entendiendo que necesitaba una nueva comunicación con mi cuerpo; me certifiqué en Health Coaching en el Institute for Integrative Nutrition (IIN) de Nueva York y fue ahí en donde todo hizo clic, pues logré tener una relación sana con mi cuerpo y mi salud, pero además encontré la forma de servir a los demás ayudándolos a tener hábitos saludables, no sólo a nivel físico, sino también a nivel mental y emocional. Allí conecté con las culturas espirituales y encontré una forma más de ayudar a las personas que querían conectarse a un nivel más profundo con su interior, haciendo viajes y retiros transformadores.
Mi
familia
Pablo, mi esposo, es lo más importante que tengo. Mi matrimonio es mi gran empresa y si los dos estamos bien, todo está bien.
Soy la menor de 3 hermanas y tengo 2 sobrinas que podrían serlo también, pues tienen 18 y 20 años, mi mamá es la reina madre y la que nos ha inculcado el cuidado de la belleza, de piel especialmente, por eso desde muy pequeña he sido fan de productos y tratamientos para preservarla.
Mi hermana mayor, Cathy, era mi mayor admiración cuando yo era chiquita y ella siempre ha tenido un gran culto al cuerpo y a la belleza. Recuerdo que iba a acompañarla al gimnasio y me sentaba a su lado, hasta que por fin cumplí 12 años y me permitieron hacer ejercicio con ella.
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Pero eso no fue siempre. Mi papá, mi mayor ejemplo en todo, estuvo esperando que llegara ese hijo que nunca llegó, por lo tanto yo fui su amiguito. Me inculcó el amor por el deporte y me enseñó que con disciplina todo se logra. Montábamos en bicicleta para después llegar a lavarlas, me hizo amar los perros y caballos que hoy son mis animales preferidos, me despertaba temprano en la finca y salía en pijama a montar a pelo, yo misma los traía del potrero. Me enseñó incluso a disparar, a montar en moto y con él hacía ejercicio cuando nos íbamos de viaje. Hasta que llegaron mis hermanas a imponer orden porque me estaba convirtiendo en un hombrecito y ahí llegó la belleza a mi vida.
Mi hermana del medio, Andrea, ha sido una mujer muy creyente de Dios y de La Virgen desde siempre, una herencia que nos dejó mi abuelita y que ella constantemente nos lo recuerda, por esto Dios es parte indispensable de mis días. El es el piloto de nuestras vidas, nos ha acompañado en momentos difíciles como familia, y hoy podríamos decir que tenemos una gran unión y un escudo que nos protege.
Además de mis dos sobrinas tengo otros dos sobrinos hombres que son los chiquitos de la casa y por los que todos nos derretimos. Mi familia es mi núcleo, mi protección, el lugar en donde estoy si me quiero desconectar y con quienes puedo ser yo misma.
Mi
Propósito
A finales del 2016 decidí certificarme como Health Coach en el Instituto de Alimentación Integrativa de Nueva York (IIN), con el objetivo de ayudar a las demás personas a tener un mejor estilo de vida, no solo a nivel de cuerpo, sino también de mente y espíritu. Desde esto me dedico a asesorar a las personas que quieren ser una mejor versión de sí mismas apoyándolas en el proceso, analizando su bioindividualidad y enfocándome en sus debilidades y fortalezas para que realmente veamos cambios en este inicio de vida.
Todo esto enfocado en alimentación y en hábitos de vida saludable, como también en otras áreas como relaciones personales, profesión, espiritualidad o en donde sientas que tienes vacíos en tu vida.